Las mejores ideas para fiestas de jubilación

Introducción
Prepárate para aprender a organizar divertidas fiestas de jubilación. Si tu hermano, tu amigo, tu pareja o tu primo se jubilan, ¿qué mejor manera de celebrarlo que organizándole una fiesta? Celebrad que la rutina, el despertador, los madrugones y los jefes se acaban para siempre, y celebradlo ¡por todo lo alto!

Organiza una fiesta de jubilación inolvidable.

La fiesta de jubilación es un hito que marca la vida de todas las personas. Se terminaron las rutinas de trabajo, ahora es el momento de disfrutar de la vida y de la pensión de jubilación. ¿Qué mejor manera de celebrar el final de una exitosa carrera que con una buena fiesta?. Aquí tienes algunos consejos para planificar una fiesta de jubilación perfecta.

El invitado de honor es lo primero.

Antes de empezar a organizar la fiesta de jubilación, es necesario averiguar qué tipo de fiestas le va a gustar al jubilado. Si este no se retira por voluntad propia (salud, reducción de personal, etc…), la persona no tendrá el ánimo para grandes fiestas. Para este tipo de situaciones, es probable que la mejor opción sea simplemente un almuerzo o una cena discreta con los colegas de trabajo con los que más afinidad tenga. Si la persona está contenta de poder jubilarse, organizar una buena fiesta sorpresa será un detalle que no olvidará jamás.

Cuando tengas claro el tipo de fiesta que vas a organizar, es el momento de decidir el lugar de celebración. Para una simple comida, todo lo que tienes que hacer es reservar mesa en algún restaurante que elija el jubilado. Puedes poner algunos globos y encargar una tarta para el postre. Para una celebración más grande, puede que tengas que alquilar una sala de banquetes.
Cuando tengas claro el lugar de celebración de la fiesta de jubilación, ya puedes enviar las invitaciones a todos los colegas. Una vez más, cómo y a quién enviar las invitaciones va a depender de lo grande que vaya a ser la fiesta. Para un pequeño evento bastará con un simple e-mail de invitación a todos los compañeros de trabajo que quieras invitar. Asegúrate de enviar también un recordatorio el día antes de la celebración de la fiesta para que nadie olvide asistir.

Que el jubilado no olvide este día jamás.

Tanto si vas a organizar una pequeña celebración, como si se trata de un gran evento, puede que quieras contratar algunos servicios o artistas para que la velada sea realmente especial. Si se trata de una pequeña fiesta, simplemente puedes contratar un cantante o dúo musical que interprete algunas canciones que sean especiales para el jubilado. Para fiesta de despedida más formal, una buena elección es un pianista o un cuarteto de cuerdas que amenice la velada con una agradable música de fondo. Si quieres una fiesta más extravagante, ponle un poco de espectáculo a la noche. Puedes optar, por ejemplo, por un mago, una banda de versiones o un hipnotizador para mantener bien entretenidos a todos los asistentes. Aquí puedes ver algunos ejemplos de artistas que pueden interesarte.

Una opción muy divertida es traer a un humorista o a algún imitador que cuente algunos chistes en honor al jubilado. Intenta facilitar al cómico algo de información sobre el jubilado para que pueda preparar un show personalizado. Es una forma de animar a la fiesta dando las gracias a los jubilados por todo el trabajo duro durante todos estos años.

Otro factor importante: la comida.

La comida es uno de los factores más importantes para organizar este tipo de fiestas de jubilación. Si vais a celebrar el evento en algún lugar que no ofrezca comidas, podéis encargar un servicio de cátering que se encargue de este asunto. Asegúrate también de que la decoración de las mesas es la adecuada. Algunos globos sujetos con grapas son un simple elemento de decoración que va muy bien para este tipo de eventos.

En toda fiesta de jubilación no puede faltar una buena tarta. Puedes encargar una tarta personalizada, decorada especialmente para el invitado de honor. Por ejemplo, digamos que el jubilado tiene previsto gastar todo su tiempo libre pescando en su pequeña barca: encarga una tarta con forma de barquita de pesca, le encantará.

No olvides reservar un espacio de tiempo para que los colegas, jefes o directivos reciten algunas palabras dedicadas a los jubilados y se haga un pequeño brindis en su honor.

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